Coronavirus: ¡Todo lo que debemos saber sobre la COVID-19!

¿Qué es la COVID-19?

El coronavirus es una familia de virus que causan enfermedades tanto en animales como en humanos. Reciben su nombre de las características protuberancias superficiales de la cápside viral.

Son la causa del 10% al 15% de las infecciones respiratorias en todo el mundo.

En el pasado, fueron responsables del brote del síndrome respiratorio agudo (SARS), que comenzó en 2002 en China, y del síndrome respiratorio de Oriente Medio en 2012 (MERS). Los coronavirus también se han relacionado con síntomas de gastroenteritis. Recientemente, una cepa similar a la del SARS, el 2019-nCoV (Coronavirus Uham) es responsable de la nueva epidemia de coronavirus 2019/20.

¿Cómo se transmite?

La COVID-19 se transmite principalmente a través del contacto con un paciente, a través de las gotitas que se producen cuando el paciente tose o estornuda, o a través de las gotitas de la saliva o la cavidad nasal. La aplicación de medidas de higiene personal es muy importante para evitar la transmisión. Por ejemplo, cúbrase la boca y la nariz con una máscara médica, un pañuelo, la manga o el codo doblado cuando tosa o estornude. Arroje inmediatamente el pañuelo en un recipiente cerrado. Lávese las manos regularmente con agua y jabón o con una solución alcohólica.

El coronavirus se transmite a los humanos a través del contacto con portadores del virus, así como de forma aerógena a través de microgotas que se dispersan en el aire al toser y estornudar. El virus también parece transmitirse a través de superficies que han sido infectadas incluso varias horas antes.

¿Quiénes tienen mayor riesgo?

¿Cuál es el perfil de las personas que están gravemente enfermas o con alto riesgo de mortalidad?

Los pacientes mayores de 70, y especialmente los mayores de 80 años, tienen un mayor riesgo. Al igual que pacientes con inmunosupresión, enfermedad cardíaca, diálisis, con problemas respiratorios crónicos, diabéticos y pacientes con enfermedades cardiovasculares.

La forma correcta de usar cubrebocas

La mascarilla quirúrgica simple es una barrera natural para los líquidos y las gotas respiratorias grandes. Si se utiliza correctamente, protege contra la transmisión de enfermedades respiratorias transmitidas por gotitas.

La mascarilla quirúrgica simple debe utilizarse:

• En cualquier caso de infección del sistema respiratorio.
• En caso de cuidado de un paciente con una infección respiratoria.
• En caso de visitas a las instalaciones de atención médica durante una pandemia o en el pico de la gripe estacional.

Instrucciones de aplicación:

• Elegir el tamaño correcto.
• Aplicar higiene de manos antes de utilizar la mascarilla.
• Aplicar la mascarilla en el rostro de manera que cubra por completo la nariz, la boca y el mentón (firmemente, sin espacios).
• Presión del elemento metálico en la parte posterior de la nariz.
• Bloqueo en el medio de la parte posterior de la cabeza y el cuello. Si es una máscara con lazos elásticos, se aplican alrededor de las orejas.
• Evite el contacto de la máscara después de la aplicación; de lo contrario, aplique higiene de manos antes y después del contacto.
• Quítese la máscara agarrando solo los cordones primero desde abajo y luego desde arriba. Si es una mascarilla con lazos elásticos, se quita sujetando los lazos al mismo tiempo, cuidado.
• Eliminación en el contenedor especial para objetos infecciosos.
• Aplicar higiene de manos.
• Evite reutilizar la mascarilla (es desechable).
• Retiro, eliminación y reemplazo en caso de que esté sucio o dañado.

La mascarilla quirúrgica sin filtro debe cambiarse si hay contacto con microgotas y aproximadamente cada 4 horas.

Cómo manejar un caso

Caso sospechoso:

• Paciente con infección respiratoria aguda (inicio repentino de la enfermedad, con al menos uno de los siguientes síntomas: fiebre, tos, disnea), con o sin necesidad de hospitalización.
• Al menos uno de los siguientes criterios epidemiológicos dentro de los últimos 14 días antes de la aparición de los síntomas.
• Estrecho contacto con un caso posible o confirmado o visita a una zona endémica.

En caso de que tenga alguno de los síntomas anteriores, quédese en casa y comuníquese con un médico de inmediato o a las líneas de atención telefónica para emergencias y orientación sobre COVID-19.

"Contacto cercano" se define como:

• Persona que vive en la misma casa con un paciente infectado por COVID-19.
• Persona que ha tenido contacto físico directo con un paciente infectado por COVID-19 (por ejemplo, apretón de manos).
• Persona que ha tenido contacto cara a cara o en interiores con un paciente infectado por COVID-19 a menos de 2 metros de distancia durante 15 minutos.
• Persona que ha tenido contacto sin protección con secreciones infecciosas de un paciente con infección por COVID-19.
• Un profesional de la salud u otra persona que brinde atención inmediata a un paciente con infección por COVID-19 o un trabajador de laboratorio que manipule muestras clínicas de pacientes infectados por COVID-19 que no hayan recibido las medidas de protección personal adecuadas.
• Un pasajero en el mismo avión, sentado dentro de dos filas de asientos (en cada dirección) de un paciente con infección por COVID-19, personas que viajan juntas o que cuidan al paciente y miembros de la tripulación que atienden la parte del avión donde está el paciente.

En caso de sospecha de atención domiciliaria, se recomienda lo siguiente:

• Alojamiento del paciente en una habitación ventilada y utilizada únicamente por él.
• Limitación de los cuidadores, idealmente una persona sin alto riesgo. No se permiten visitas.
• Alojamiento de otros miembros de la familia en una habitación diferente y si esto no es posible, mantener una distancia de al menos 1 metro del paciente.
• Restricción de los movimientos del paciente en casa y buena ventilación de las zonas comunes.
• Uso de una simple mascarilla quirúrgica por parte de la persona que atiende al paciente. Evite el contacto de las manos con la mascarilla. Desecharla cuando esté visiblemente sucia o mojada y después de su uso. Luego se aplica la higiene de manos.
• Aplicar higiene de manos después de cualquier contacto con el paciente o su entorno, antes y después de la preparación de alimentos, antes de comer y después de ir al baño (lavado con agua y jabón, uso de antiséptico alcohólico dependiendo de si las manos están visiblemente sucias o no).

Se debe capacitar a los pacientes y sus familias para que apliquen las medidas adecuadas para limitar la transmisión de la enfermedad durante el tratamiento domiciliario.